¡En Jimini’s llevamos elaborando productos alimenticios comestibles para insectos desde 2012! Tenemos una gama de productos diferentes: insectos enteros sazonados salados y dulces (perfectos para los aperitivos con amigos y otros tentempiés cotidianos) y productos de alimentación dulces y salados como granola, pasta, barritas de proteínas hechas con polvo de insectos.
«Harina de insectos», pero ¿cómo es posible? Ya sabes, harina de trigo, harina de alforfón, harina de castaña, ¡incluso harina de espelta! Pero nunca habías oído hablar de la harina de insectos.
¡Te contamos más!
También llamado polvo de insectos, tiene naturalmente los beneficios nutricionales de los insectos enteros, en mayores concentraciones: proteínas, minerales, aminoácidos, omegas, todo está allí. Es la solución perfecta para las personas escépticas a la hora de comer insectos enteros: ¡invisible a la vista y no se siente en la boca!
¿Para qué se utilizan las harinas de insectos en general? Actualmente se utiliza principalmente como ingrediente para enriquecer los nutrientes de ciertos productos, como en nuestras barritas de proteínas Jimini’s, por ejemplo. También se puede encontrar en ciertas galletas de aperitivo y otras galletas saladas, ¡o incluso en forma de batidos!
Incluso se puede ir más allá utilizando harina de insectos en preparaciones destinadas a sustituir una porción de proteína animal o vegetal tradicional, haciendo tofu o incluso filetes de insectos.
La harina de insectos también puede utilizarse «sola» o mezclada con otras harinas. Puede consumirse tal cual, por sus cualidades nutritivas, o integrarse en la repostería, para hacer pan o pasteles (galletas, galletas de insectos, financiers…).
¿Harina de insectos o polvo de insectos?
No nos compliquemos, la propia definición de la palabra «harina» es efectivamente «un polvo que se obtiene al moler un alimento en pequeños trozos», por lo tanto los dos términos son sinónimos, cada uno puede optar por utilizar uno u otro, para nosotros «harina» tiene más sentido en la alimentación.
Concretamente, ¿de qué está hecha nuestra harina de insectos? En Jimini’s lo hacemos con pequeños gusanos de la harina llamados búfalos. Primo pequeño del gusano de la harina Molitor, el gusano búfalo tiene grandes cualidades nutricionales: es rico en proteínas, contiene también todos los aminoácidos esenciales y es una fuente de hierro. Esto hace que nuestra harina de lombriz de búfalo sea la base de nuestras preparaciones dulces y saladas que son nutritivas, buenas para el cuerpo y buenas para el planeta.
¿Cuáles son las ventajas medioambientales de la cría de insectos? Porque sí, los insectos, además de ser buenos para el gusto, ¡son buenos para nuestro hermoso planeta! Durante la reproducción, los insectos necesitan menos espacio y agua.
También necesitan menos comida. Por último, los insectos producen un 99% menos de emisiones de GEI* (gases de efecto invernadero) que la cría de ganado vacuno y, por término medio, el 80% del insecto es comestible, frente al 55% del pollo y el 40% de la carne de cerdo o vacuno.
Por todo ello, en Jimini’s estamos convencidos de que los insectos son una de las soluciones para alimentar a la población mundial del futuro. En efecto, en 2050 seremos 9.000 millones de seres humanos en la Tierra, con las mismas necesidades nutricionales, ¡sobre todo en proteínas!
La harina de insectos podría ser, por tanto, una de las soluciones proteicas alternativas, fácil de integrar en las preparaciones diarias.
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