Preguntas más frecuentes

2.500 millones de seres humanos ya la consumen, es natural, es sana y sobre todo… ¡Es BUENA! Entonces, ¿por qué privarnos? Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), cerca de un tercio de la humanidad consume regularmente insectos, por sus cualidades nutricionales y gustativas. Cada vez se habla más de los insectos como uno de los componentes de la alimentación del futuro. En JIMINI’S, creemos que el futuro empieza ahora, por lo que estamos trabajando como hormigas para introducir poco a poco los insectos en el menú.

De hecho, ya comes 500 gramos al año sin saberlo. Están presentes de forma natural en zumos, frutas, verduras y en el colorante alimentario E120, elaborado a partir de la cochinilla, que da un color rojo a muchos alimentos. Advertencia: Los insectos pertenecen a la gran familia de los artrópodos, como los crustáceos. El caparazón de estos últimos contiene quitina, al igual que el exoesqueleto de los insectos. Por lo tanto, se desaconseja totalmente el consumo de insectos comestibles si se es alérgico al marisco.

Según las últimas estimaciones, hay más de 2.000 insectos comestibles, pero los más consumidos son los ortópteros (grillos, saltamontes…) así como las larvas de coleópteros (gusanos, gorgojos…) o los himenópteros (hormigas, larvas de abeja…). Por su seguridad, no se recomienda comer insectos encontrados en la naturaleza porque podrían estar contaminados por pesticidas o parásitos. Por ello, nuestros insectos se crían en granjas especializadas que garantizan que no haya contaminación con el exterior.

¡Pruebe y lo sabrá! Por supuesto, depende del insecto y de su preparación, pero JIMINI’S ha pensado en el paladar francés y aromatiza sus insectos con una variedad de sabores originales: curry amarillo, sésamo y comino, pimienta y tomates secos, etc. También puede degustarlos sin condimentos gracias a nuestra gama de insectos naturales, ¡perfectos para integrarlos en todas sus preparaciones diarias! También tenemos una gama de productos dulces y salados, como granolas, barritas de proteínas y pasta, todos ellos elaborados con harina de insectos en polvo; una vez en forma de harina e incorporados a las preparaciones, el sabor de los insectos es casi irreconocible.

Los insectos son una fuente de alimentación sana y nutritiva, con importantes aportes de proteínas y vitaminas, omega 3 y 6, pero también de minerales. Además, contienen naturalmente poca grasa. Para los entendidos, los insectos también contienen todos los aminoácidos esenciales, así como las vitaminas B1, B2 y B12, lo que los convierte en un alimento especialmente interesante a la hora del aperitivo y otros tentempiés en los que generalmente comemos demasiada grasa y azúcar.

Por razones de calidad y de trazabilidad, nuestros grillos, moledores y grillos se crían en granjas europeas especializadas. Esto también nos permite evitar un transporte costoso para el medio ambiente. A continuación, se deshidratan y se preparan en Francia, en nuestro taller cerca de Melun. Así que no corremos por los campos persiguiendo grillos.

La cría industrial de insectos comestibles tiene muchas ventajas medioambientales: los insectos necesitan menos espacio y agua, emiten muy pocos gases de efecto invernadero (un 99% menos que la carne de vacuno), por lo que podemos concluir que su impacto medioambiental es muy reducido en comparación con la cría de proteínas animales «tradicionales».  Por último, una media del 80% del insecto es comestible, frente al 55% del pollo y el 40% del cerdo y la ternera.

Los Grillos, Molitors y Crickets de JIMINI están listos para ser comidos, sólo hay que abrir la bolsa, cogerlos directamente de ella o verterlos en un bol. El aperitivo es ante todo un momento sencillo y de convivencia. ¡En cuanto a los insectos enteros al natural, están listos para ser cocinados según sus deseos o siguiendo una de nuestras recetas en nuestro blog! Nuestras barritas de proteínas con polvo de insectos están listas para ser machacadas para llenarse de energía.

Los insectos contienen los mismos alérgenos que los crustáceos, los ácaros y las arañas; en general, es la quitina la que provoca las reacciones alérgicas. Si cree que puede ser alérgico a alguno de estos artrópodos, no dude en consultar a un alergólogo y no corra riesgos. ¡Sí al aperitivo, no al hospital!